Somos un país exportador de talento mientras que EEUU es un gran importador ademas usar el que produce. ¿Si no podemos pagar salarios comparables a los de EEUU, como le podremos hacer para importar talento o para pagar mejores salarios?
La base de esa respuesta está en la economía. Calderón basó su economía en la guerra y en generar inversión extrajera. Lo malo es que los empresarios mexicanos no invierten y se llevan mucho, empezando por Slim. La empresa nunca está dispuesta a pagar precios justos, realiza mucha corrupción comprando diputados y mantiene un Estado empresarial muy pueril con sus prácticas monopólicas de telecomunicaciones. El Estado debe de culparlo de muchos de los males, es el más rico y no debemos de estar orgullosos porque lo hace a partir de la tranza y el engaño de los bolsillos de los mexicanos. Y nosotros que nos dejamos también tranzar. Tan solo con demandarlo y ganar todas las demandas de publicidad falsa y puntos de círculo azul falsos, ya sería una buena ventaja. Cuántas veces no hemos ido a recoger un celular y nos hemos encontrado que el valor en puntos NUNCA es equivalente al descuento del costo, y su argumento siempre es que no te niegan los puntos, pero tampoco te los sueltan todos, ni te arman una tabla de equivalencia. Inclusive los bancos y las tiendas departamentales son mucho mejores en este aspecto. Telcel NUNCA premia, al contrario, engaña y castiga.
Y entonces, hasta que no deje de haber flujos de dinero de esas magnitudes en una práctica tan común, pues nunca habrá dinero para otras cosas. Tan solo desapareciendo Telcel y Telmex, la economía del país crecería a pasos agigantados, y esto permitiría a cualquiera poder comprar y elaborar productos nacionales. No los hacemos porque realizarlos cuesta caro y todos tenemos necesidades como gastar en planes o tarjetas de celular.
La otra es que se necesita cambiar la legislación. El caso Slim es solo un ejemplo, también necesitamos cambiar la legislación de la economía y recursos de los ingresos de ambos congresos, y la cantidad de los mismos, por lo menos en la cámara de diputados. La otra es cambiar nosotros como mexicanos y retomar la filosofía del video de Nosotros los Mexicanos de YouTube.
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